“El Corazón Helado” es una novela de la escritora española Almudena Grandes que fue publicada en el año 2007. Ganó, entre otros, el VII Premio de Novela Fundación José Manuel Lara y el Premio al Libro del Año 2007 que otorga el Gremio de Libreros de Madrid. La reseña literaria del día de hoy está dedicada a este libro que ha vendido más de 700,000 ejemplares y que marca, sin duda alguna, un antes y un después en la exitosa carrera de una de las más queridas y reconocidas escritoras de la literatura española actual.
¿Conoces a Almudena Grandes?
Si no es así, te voy a hablar brevemente de ella. Almudena nació en Madrid en el año 1960. Estudió Geografía e Historia en la Universidad Complutense de Madrid y se dedicó a trabajar dentro del mundo editorial como redactora, columnista, articulista y colaboradora habitual de importantes medios de comunicación.
Ella misma destacó que Benito Pérez Galdós fue, probablemente, su influencia literaria más importante y eso podría explicar la razón por la que sus historias tienen tanta expresividad y profundidad psicológica. En numerosas oportunidades hizo pública su postura política y como creadora literaria e historiadora, siempre fue congruente con su forma de pensar y de entender los acontecimientos del pasado, del presente y de un hipotético futuro.
Seis obras suyas han sido adaptadas al cine y su admiración por Luis Buñuel es patente en la versión cinematográfica de “Los aires difíciles”, cuyo final es un discreto guiño al de la película “Viridiana”, una de las obras maestras de Buñuel protagonizada por Silvia Pinal, Paco Rabal y Fernando Rey. “Viridiana” está basada, precisamente, en la novela “Halma” de Benito Pérez Galdós.
Es indiscutible la influencia a nivel personal y profesional que tuvo en ella su marido Luis García Montero, reconocidísimo literato y catedrático español, director del Instituto Cervantes desde el año 2018.
De forma inesperada, tras padecer una enfermedad a la que no pudo ganar la batalla, Almudena falleció el 27 de noviembre de 2021 a los 61 años de edad, dejando helado el corazón de todos sus lectores que esperaban aún muchas historias más nacidas de su inagotable inspiración.
A raíz de su partida ha recibido muchos reconocimientos póstumos que se suman a los numerosos premios que se le otorgaron en vida, y una excelente noticia es que “El corazón helado” se convertirá próximamente en serie de televisión para beneplácito de sus admiradores.
¿De qué trata “El corazón helado”?
Ya hay un español que quiere
Antonio Machado
vivir y a vivir empieza,
entre una España que muere
y otra España que bosteza.
Españolito que vienes
al mundo te guarde Dios.
una de las dos Españas
ha de helarte el corazón.
¿Te parecen familiares estos versos? Seguramente, ya que “Españolito que vienes al mundo” es un poema breve de Antonio Machado muy conocido gracias a la versión musicalizada que el cantautor Joan Manuel Serrat hizo del mismo en el año 1969, como parte de su disco “Dedicado a Antonio Machado, poeta”.
Es un poema muy corto y contundente que habla de la España dividida a raíz de la Guerra Civil Española. Esa España fraccionada y enfrentada es precisamente el escenario en el que se desarrolla “El corazón helado” y es el último verso de ese poema de Machado el que da título a la novela.
El argumento de esta ambiciosa historia abarca un marco temporal muy extenso que comprende prácticamente la totalidad del siglo XX, desde la década de los años 20 hasta los primeros años del siglo XXI. Almudena se centra en los acontecimientos que sucedieron en España en ese tiempo, usando como punto de referencia el conflicto bélico que comenzó en 1936.
La estructura de la trama no es lineal; los hechos del pasado y los del presente son narrados de forma paralela a través de dos hilos argumentales aparentemente diferentes. Aunque comprendo que el futuro lector esté más interesado en el contenido del argumento que en este tipo de precisiones de tipo formal, me parece importantísimo destacar que la maestría de la narrativa del Almudena no se limita a dar saltos en el tiempo sin sentido, sino que la obra en su totalidad es un equivalente a una partida de ajedrez en la que el movimiento de cualquier pieza en el presente o en el pasado marca el rumbo que ha de seguir la historia en el capítulo siguiente.
Lo que para algunos es una virtud para otros puede ser un inconveniente. A mí me parece que es una manera de agilizar los acontecimientos e incrementar la emoción y el suspenso, pero he escuchado otras opiniones de lectores a los que les parece que es una novela con una estructura muy compleja para digerirla con agrado.
La trama se desarrolla en torno a dos familias: los Carrión y los Fernández. Todo comienza en el sepelio de Julio Carrión en Torrelodones en el año 2005, donde se encuentran por primera vez Álvaro Carrión y Raquel Fernández y a partir de ese momento los hilos del pasado se entrelazan de nuevo para unir a las dos estirpes.
El difunto, Julio Carrión González, nació en Torrelodones en el año 1922. Su padre fue un humilde hombre de campo con pocas luces y muy tradicionalista. En contraste, su madre era una joven maestra de ideas socialistas que ejercía una especie de liderazgo en su comunidad. Estas enormes diferencias entre sus padres provocan que, un poco antes de estallar la guerra, la madre de Julio abandone a su esposo huyendo del pueblo con su amante, un maestro socialista al igual que ella.
Al quedarse solos Julio y su padre, abandonan el pueblo para trasladarse a vivir a Madrid en unas condiciones de vida muy precarias. Julio, que en ese momento era un joven de 15 años, era un muchacho seductor, simpático y cautivador que se afilió a las Juventudes Socialistas Unificadas, donde brilló de inmediato por su encantadora personalidad.
Al término de la guerra, Julio conoce casualmente a un joven falangista y decide partir con la División Azul a luchar con los alemanes en la frontera rusa. Al término de la Segunda Guerra Mundial opta por vivir en París, donde conoce a la familia Fernández.
Cuando decide regresar a España se convierte en un poderoso empresario con la ayuda de sus amigos falangistas, siendo su época más exitosa a partir de la muerte de Franco en 1975. Se casa con una mujer que es 14 años menor que él y tiene cinco hijos con ella; su nombre es Angélica Otero Fernández y, tal y como su apellido lo indica, es familiar del otro protagonista de la historia: Ignacio Fernández.
Al contrario de la familia Carrión, la familia de los Fernández era acaudalada y de ideas republicanas. En julio de 1936, al estallar la guerra, Ignacio abandona sus estudios de Derecho en Madrid para ir al frente a combatir. Al ser comunista, Ignacio asciende rápidamente a capitán, lo que causa el disgusto de su hermano Mateo, quien advierte que los comunistas acaparan los mejores cargos en el ejército, pasando por encima de socialistas y anarquistas.
Cuando el gobierno republicano tiene que abandonar Madrid para trasladarse a Valencia, el propio Ignacio será una víctima de las traiciones entre las diferentes facciones del bando republicano, ya que es encarcelado por los anarquistas.
Ignacio escapa y logra pasar la frontera, pero en ese momento Francia es ya un país invadido por los nazis y es apresado de nuevo. Cuando logra nuevamente su libertad, comienza, como tantos exiliados, su nueva vida en suelo francés. Ahí se entera de la muerte de su hermano y de la de un cuñado que fue fusilado tras ser delatado por su propia prima.
Ignacio comienza su nueva vida en Francia donde se casa y tiene hijos y nietos. Al morir el dictador en 1975, regresa a vivir a Madrid y tiene un lazo muy estrecho con su nieta Raquel, quien es su acompañante y su mejor confidente.
Álvaro Carrión (el penúltimo de los hijos de Julio Carrión) y Raquel Fernández (nieta de Ignacio) se conocen y se enamoran y el pasado de sus antecesores plagado de secretos, traiciones y mentiras regresa para hacer que su vida tome un rumbo muy distinto al que tenían planeado.
Los protagonistas de esta historia, Julio e Ignacio, representan claramente dos personalidades distintas, delineadas por las circunstancias que rodearon la infancia y la juventud de cada uno de ellos y por las decisiones que tomaron durante su vida. Julio, a pesar de sus carencias o quizá a causa de ellas, era un hombre arrojado y temerario que no puso límites a sus actos y a su ambición. Ignacio era un hombre de principios y educación al que la vida misma arrojó a las fauces de esa fiera que fue la Guerra Civil Española y ahí aparecieron todos los demonios que durante la primera parte de su vida no conoció.
Además de ser una novela de intriga, suspenso, traición y secretos que mantiene la tensión hasta la última página, “El corazón helado” es un bellísimo y entrañable homenaje a todos aquellos que vivieron esa terrible etapa de la historia de España, a sus familias, a los que permanecieron en territorio español, a los exiliados, a los que murieron y a los que vivieron para contarlo.
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¿Quieres enterarte de algunas curiosidades?
Almudena saltó a la fama a raíz de la publicación del drama erótico “Las edades de Lulú”. Cuando Bigas Luna decide llevar el argumento al cine, la actriz que iba a tener el rol protagónico era Ángela Molina. Sin embargo, la famosa hija del cantante Antonio Molina rescindió su contrato diez días antes de que comenzara el rodaje argumentando que las escenas que debía filmar eran pornográficas y no de erotismo blando como se lo habían explicado.
Nadie podía creer que abandonara la producción habiendo ensayado su papel con el propio Bigas Luna, pero así fue. Al final, el papel de la pequeña Lulú que vive su despertar sexual con apenas quince años fue realizado por Francesca Neri.
El libro vendió más de 100,000 copias únicamente en España y María Barranco ganó un Premio Goya como mejor actriz de reparto. Parte del elenco está conformado por Oscar Ladoire, Fernando Guillén Cuervo, Rosana Pastor, Pilar Bardem y su jovencísimo hijo Javier Bardem en una de sus primeras incursiones en el mundo del séptimo arte.
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